martes, 29 de septiembre de 2009

Jill Bolte Taylor, neuroanatomista, intelectual.

Dra. de Harvard dedicada al estudio de enfermedades mentales. Jill Bolte Taylor un día amaneció con una embolia cerebral en donde tuvo la oportunidad de estudiar en carne propia los efectos de un derrame en la parte izquierda de su cerebro. Jill Bolte Taylor tuvo un golpe de realización cuando se dio cuenta que el Nirvana se percibe con el hemisferio derecho del cerebro y que siempre está presente para todos nosotros.




domingo, 27 de septiembre de 2009

Las Sensaciones Documentadas

Es sólo un momento. ¿Qué es un momento? A mi parecer, un momento es como lo dicen las primeras palabras: es sólo un momento. Pero claro, ese momento tiene infinitudes de percepciones y maneras de vivirlo.
¿Y si estamos comunicados mentalmente? ¿has escuchado de la telepatía?. Vivimos en un mundo de constante comunicación. Por ahí, cuando no nos hablamos estamos comunicandonos aunque no se quiera, es increíble la gran especie que somos.
Tanto, que hasta por ahí ni sabemos que estamos hablando por otro medio, por un medio que va más allá de nuestra lengua. Sucede que muchos no sabemos todo lo que engloba a la inconciencia, pero creo que allí dentro hay cosas muy significativas y explicativas.
No eres el culpable de nada, pues es un mundo difícil, todos los sabemos. De chico te han inculcado cosas en tu cabeza que tú las has tomado como verdaderas y únicas para este único y raro mundo que carga un sin fin de confusiones. Quizá no es un mundo difícil, sino que somos una especie viviente difícil, que de a poco vamos autodescubriéndonos... y el caso es ese mismo. ¿No somos tiernos? sacando de lado todo lo feo que hacemos, como inútiles e ignorantes que somos a la vez, pero es que es lo que somos, lo que hay...


EXTRAÑO, ¿eres un extraño?, pues ¡NO!, eres uno más, un acorde distinto, que tiene otro mundo distinto en su mente, ni peor ni mejor que otro. Pues si hemos nacido, y alguna vez reído, y descubierto que eso es hermoso, pues sigamos nuestro corazón para una vida feliz y placentera, a pesar de las obligaciones que debemos cumplir para subsistir en este mundo dominado por un Poder poco humano. Cada uno con su granito de arena, desmuestre el valor de la vida, que es simplemente el estar vivo junto a otros seres humanos,que cada uno tiene su caja de sorpresas. Comprendiéndonos y amándonos nunca nos sentiremos afectados ni dolidos, algo que la humanidad entera no pudo expresar al planeta tierra hasta hoy día en cuanto a su totalidad, hasta llegar al punto de definir a la raza humana como amorosa (paraíso).

Africk Judgiyuto

sábado, 26 de septiembre de 2009

Michel Maffesoli: "El futuro ya no moviliza energías"

Para el sociólogo francés Michel Maffesoli posmodernidad es el nombre "provisorio" que se le da a esta época en la que no se piensa en mañana y sólo se trata de vivir intensamente el presente. En América Latina y en Extremo Oriente, afirma, se desarrollan los laboratorios de la creatividad.

MAFFESOLI EN EL PRESENTE POSMODERNO. Recién en el siglo XIX nació el término modernidad. Hasta que se encontró un nombre, cuenta el autor, para referirse a esa época se hablaba de posmedievalismo.

Michel Maffesoli vive sólo el presente. "Creo que no existe una cosa llamada futuro", dice en esta charla ocurrida en un hotel boutique de Buenos Aires pleno de objetos envejecidos y futuristas que contradicen la identificación temporal de este profesor de sociología de la Sorbona. Vino a Buenos Aires a dictar un seminario en el Doctorado en Ciencias Sociales de la FLACSO y a presentar su último libro El Reencantamiento del mundo (Dedalus editores) en la Alianza Francesa de Buenos Aires. Viaja con frecuencia a Sudamérica y a Oriente donde detectó los "laboratorios de la posmodernidad" distinguibles por el culto a la creatividad. En los años ochenta Maffesoli teorizó sobre las tribus urbanas y desde entonces su apellido va enlazado a cuanto agrupamiento juvenil ocurra en cualquier lugar del mundo. Da lo mismo si se trata de Tokio, Nueva York, Barcelona o Buenos Aires, las conductas tribales se repiten y hallan ecos a un lado y otro del mundo. "Nuestras sociedades van a ser en cierto modo una especie de mosaico de esas tribus y cada uno va a participar en varias de ellas. En función de mi gusto sexual, musical o religioso, voy a estar hoy acá, mañana en otra tribu", define antes de volcarse a reflexionar sobre el contexto en que este fenómeno se desarrolla. Por eso, comienza esta entrevista bautizando y caracterizando la era en la que vivimos.

-En Europa la intelligentsia política, periodística y universitaria continúa hablando de modernidad para describir el período en el que vivimos. Soy de los que creen que estamos en la posmodernidad dado que tenemos toda una serie de valores que ya no son los que imperaron durante la modernidad. Pero el problema es que siempre hay un desfasaje entre lo que se vive y lo que se piensa y lo que se nombra. Hay que tener en cuenta que el nombre mismo de modernidad apareció recién en 1848: fue Charles Baudelaire justamente quien lo utilizó para nombrar lo que estaba ocurriendo. Hasta entonces, solamente se hablaba de posmedievalismo: lo que venía después de la Edad Media. Y no es sino hasta la mitad del siglo XIX que va a empezar a hablarse de modernidad para nombrar lo que se vivía. Creo que estamos más o menos en la misma situación. Es falso hablar de modernidad. Lo único que tenemos es el término posmodernidad para decir lo que está en juego. Y recién más adelante –tal vez en 2050 o lo que fuere–, se podrá encontrar el término que caracterice lo que vivimos ahora. Quiere decir que posmodernidad es un término provisorio para decir que hemos superado la modernidad.

-¿Qué características encuentra en la posmodernidad que la diferencian de la modernidad?

-Hay tres grandes valores modernos: el trabajo –que se convierte en el imperativo esencial, aquello a través de lo cual hay una realización de cada individuo. Segundo, la razón como único elemento que caracteriza tanto al individuo como a la sociedad. Y tercero, el futuro: la fe en el porvenir. Tenemos ahí, los pivotes modernos que luego se encontrarán en la educación, en lo social, en la economía, como lo mostró Michel Foucault, en todas las instituciones que se elaboran en el siglo XIX. Este es el aspecto de la sociedad oficiosa, identificable en las generaciones jóvenes que ya no se reconocen en la sociedad oficial. Ahora bien, esa sociedad oficiosa, que yo llamo posmodernidad ya no gira en torno del trabajo sino de la creación: hacer de la propia vida una obra de arte, poner el acento en lo cualitativo de la existencia, la dimensión un poco hedonista. En segundo lugar, ya no la razón como simple vector por el cual uno se piensa a sí mismo y la sociedad también, sino la imaginación, lo imaginario y en tercer lugar, el presente dado que en términos de temporalidad ya no se vive más el futuro, el carpe diem, diría incluso: presente-ísmo. Eso es, dicho de una manera muy simple: lo que se abandona –trabajo razón futuro– que es oficial, en las instituciones oficiales. Y después, el gran elemento de la posmodernidad con su dimensión, una vez más, de creación, de imaginación, de presente, que sería un poco la napa freática de la sociedad actualmente.

-Una vez dijo que América Latina era el laboratorio de la posmodernidad, ¿por qué lo cree?

-Decía que Europa había sido el laboratorio de la modernidad porque justamente se había puesto el acento en esos valores que acabo de señalar. Lo que me impresiona de América Latina y de Extremo Oriente –Japón, Corea– es que ahí es donde la imaginación es importante, es ahí donde, en el fondo, se da no sólo el trabajo sino la creación. No simplemente el futuro, sino el presente. Y también en América Latina es donde se están elaborando –mucho más que en Europa– estos nuevos valores. Por eso hablo del laboratorio de la posmodernidad. El problema es –lo veo en Brasil adonde voy a menudo– que los intelectuales están muy marcados por los esquemas europeos: demasiado marxistas, demasiado estructuralistas. Transplantan a la realidad latinoamericana realidades de pensamiento que habían sido elaborados en Europa o en América del Norte. Desgraciadamente la intelligentsia sigue determinada por los modelos estadounidenses y europeos.

-Entonces, ¿podemos pensar en el futuro? ¿Existe el futuro?

-Creo que no. Efectivamente, se puede caracterizar, comprender bien una civilización, una época, en función del elemento temporal en el que esa época pone el acento. Hay grandes épocas –la Edad Media, por ejemplo– donde lo que se llamaban las grandes sociedades tradicionales tomaban el pasado como elemento temporal. Hay otros grandes momentos culturales para los cuales lo importante es el futuro. La modernidad es eso, proyectar: los mañanas que cantan, la sociedad perfecta, el mito del progreso. El progresismo del siglo XIX es un buen ejemplo de esa proyección de la energía hacia el futuro. Y luego hay otras grandes civilizaciones para las cuales lo que importa es el presente. Aclaro que eso ha hecho una civilización como el Renacimiento, el Quattrocento en Italia, lo que se llama ese tiempo que fue el siglo III o IV de la era cristiana, lo que se conoce como la decadencia romana, de hecho, en ese período se elaboraban cantidades de cosas, pero lo importante era el presente. Y en mi opinión, entramos en otro de esos grandes lapsos de presente-ísmo. Es interesante ver volver esa idea hedonista, esa idea de carpe diem. O sea que, desde esta perspectiva, lo que está en gestación actualmente, la gran tendencia, está focalizada en el presente; la idea misma de futuro ya no moviliza las energías. Un ejemplo: veo en Europa, y en Francia en particular, respecto de la gente de mi generación, una desafección con respecto a lo político. Lo político no funciona más. Ni izquierda ni derecha. Yo digo "lo" político porque lo propio de lo político es proyectivo, está orientado hacia el futuro. Y estas jóvenes generaciones no adhieren, no se identifican más con los grandes valores futuristas. Se concentran en el presente.

-¿Y cuáles son las consecuencias para una sociedad cuando no piensa en el futuro?

-Justamente que no podemos imaginar que el futuro no sea el valor oficial, que no sea la temporalidad oficial porque toda nuestra concepción de la sociedad, de las instituciones se hizo en proyección hacia la búsqueda de la perfección futura. Hubo otros períodos históricos en los cuales la energía –lo digo de una manera un poco más sofisticada– no estaba tendida hacia afuera –extensiva– sino que tendía hacia adentro –intensiva. Es la intensidad del instante. Entonces ya no se busca la eternidad en el paraíso celestial, en el paraíso terrestre sino que se buscará la eternidad en el buen momento, la buena ocasión, la oportunidad –lo que vivo en el presente, comiendo, bebiendo, bailando– es el carpe diem. En esta joven generación me sorprende esa especie de intensidad del momento. No tiene ganas de hacer proyectos de vida, proyectos políticos, económicos –pero incluso proyectos de vida. Hay circunstancias en que la civilización se proyecta; hay otras ocasiones en que la civilización vira al presente. La temporalidad de la posmodernidad es el presente.

-Ha dicho que en Francia los jóvenes no adhieren a la izquierda ni a la derecha, ¿tampoco simpatizan con otras expresiones políticas? ¿Son apolíticos?

-En primer lugar, hay que señalar que la separación izquierda derecha ya no es muy pertinente. En los sesenta se podía reconocer de inmediato cuando alguien hablaba si era de izquierda o de derecha. Ahora, en las mismas personas, hay un poco de izquierda, de derecha, de ecología. En segundo lugar, lo político está saturado en las generaciones nuevas. Ya no existe ese compromiso político para la realización de una sociedad futura –sea revolucionaria, conservadora o reformista. Todavía hay jóvenes que entran en los partidos políticos, pero es una minoría pequeña. Eso no quiere decir que no haya regularmente formas de rebeldía, de rebelión, pero son explosiones espontáneas que van a surgir en un momento dado sin que se inscriban en un programa. Son más bien explosiones de humor: antiglobalistas, ecologistas, contra la cumbre del G-20, contra la cumbre del G-8. A veces muy violentas, brutales, sangrientas, pero que no se inscriben en una perspectiva política. Hay rebelión, hay revuelta, pero no es programada ni programática.

-Como las revueltas en la periferia de París...

-Por ejemplo. Hasta los partidos políticos les tienen miedo a esas rebeliones. Aun los de izquierda. Incluso hay obreros –no jóvenes– que para defender el trabajo en una fábrica emprenden acciones muy violentas: amenazan con hacer volar la planta o cosas por el estilo. La lógica sindical es huelga, negociación, pero estas expresiones señaladas son muy fuertes y violentas.

De Revista Ñ

jueves, 24 de septiembre de 2009

Rincones.

Luces por todos lados
yo no puedo pensar en todo
adonde estan esas curas
o aquellas donaciones

Los aviones siguen volando
justo por aquel rincón
fuertes como un escape veloz
y yo justo por otro rincón

Bebes nacen en el mundo como maravillas
y los adultos se niegan a la paz
estamos todos en un rincón
bonito o malvado

Rápido dame una razón
para querer soplar ese polvo
justo por ese rincón
tan fuerte como te sostengo

Felicidad esta por venir
justo alrededor del rincón.

Tips para tu futura/nueva banda musical. (Sobre todo en Córdoba, Arg.)

Todo cuesta plata, formar una banda también. A continuación hay un texto que saqué de cordoba.net, en el cual se encuentran algunos detalles a tener en cuenta para la formación de tu banda:

A la hora de concretar el sueño formar una banda, hay un sinfín de cuestiones a tener presentes para lograr que las cosas funcionen y se ahorren dolores de cabeza.
Además, conocer los por menores de lo que implica conformar una agrupación le permite a los músicos abocarse a lo que ellos de verdad saben hacer, sin perder el tiempo en asuntos accesorios.
A continuación, una lista con una serie de tips que, bien usados, salvan tiempo y trabajo.

Conseguir instrumentos. No hace falta ir a Buenos Aires. En el interior del país existen locales donde se puede comprar instrumentos nuevos y/o usados. En Córdoba, Musicor (Olmos 211), y Altos músicos (Olmos 139).
A tomar nota: los precios de las guitarras nuevas van desde los $ 550 pesos hasta los $ 15.000, mientras que los bajos arrancan en $ 700. Si la idea es comprar algo usado, se pueden conseguir desde $ 350. Una batería nueva puede costar desde $ 2.000 y una usada desde los $ 1.000.

Salas de ensayo. Si los integrantes de la banda no poseen lugar propio para ensayar, lo recomendable es alquilar alguna sala por hora, antes de molestar a vecinos y familiares. Algunas de Córdoba para agendar: El limbo espacio musical, que cuenta con equipamiento para una banda de rock completa y además alquila instrumentos para músicos que lo necesiten, y Grandharva, con dos salas de ensayo bien acondicionadas. Los precios oscilan entre $ 25 y $ 50 la hora.

Salas de grabación. Si llega al disco, es conveniente que la banda o artista pida asistencia a quienes saben de audio y tienen las herramientas para materializar las ideas musicales. Siempre dentro de los límites de la ciudad, lugares como Electra o 440 estudio son para recomendar. La hora de grabación cuesta aproximadamente entre $ 50 y $ 80, según el lugar.
A tener en cuenta: cada tema puede llegar a demandar 8 horas de trabajo en estudio (con masterización incluida).

Cómo registrar los temas. Una vez que la banda ya cuenta con temas propios, hay que registrar los derechos de autor sobre melodía y letra creadas. Para ello es importante tener en cuenta los requisitos que Sadaic exige a los autores de música, y que pueden ser consultados acá.

Marketing y difusión. Las nuevas bandas saben más que nadie lo importante que es hacer conocer su material a través de todos los medios posibles. La Web representa la herramienta más económica y rápida gracias a la diversidad de sitios gratuitos en donde es posible crear una página, subir música, videos, eventos, y formar comunidades. Los dedicados exclusivamente a la música son El sonar , Pure Volume y Sónico. Sin embargo, muchas bandas prefieren crear perfiles en Fotolog , My Space o Facebook ya que son los más usados por el común de los jóvenes.

Dónde tocar. Córdoba reserva algunos espacios potables para bandas emergentes. En algún momento, la zona del Abasto representaba el espacio indicado para aquellos que recién se iniciaban. Todavía hoy, y en esa parte de la ciudad, El Cubo (Rivera Indarte y bulevar Los Andes) mantiene viva la llama del under cordobés. Otro espacio en crecimiento y acostumbrado a abrir sus puertas a bandas locales es Club 69 (Pasaje Verna casi Colón).

Otra para tener en cuenta: “Recreo Personal” es el primer concurso nacional de talento musical realizado por Internet ( www.recreopersonal.com). Personal y Sony Music presentan este concurso para alumnos de colegios secundarios de todo el país. El certamen tiene por objetivo premiar el talento entre los adolescentes y armar una banda pop. Los ganadores además recibirán, entre otros premios, el equipamiento de un aula de música para el colegio o institución educativa a la que pertenecen.

Hasta el 22 de octubre está abierta la inscripción, para chicos de entre 16 y 19 años,

Ahora, contanos tu experiencia. ¿Qué otro consejo creés que hay que tener en cuenta a la hora de empezar a hacer música? ¿qué lugar recomendás para ensayar, grabar o tocar?

miércoles, 23 de septiembre de 2009

Llega el DNI electrónico


¿Le gustaría realizar compras firmadas y seguras a través de Internet, hacer trámites con las Administraciones Públicas a cualquier hora sin guardar colas y asegurarse de que nadie más que usted accede a su ordenador personal? Son algunas de las ventajas del DNI electrónico, un documento que se implantó hace tres años y que ya llevan más de 12 millones de españoles en su cartera.

Ante la generalización del uso de Internet, el nuevo Documento Nacional de Identidad surge para adecuar los mecanismos de acreditación de la personalidad a la nueva realidad y disponer de un instrumento eficaz que traslade al mundo digital las mismas certezas con las que operamos cada día en el mundo físico. En concreto, nos permite conocer sin lugar a dudas la identidad de la persona con la que hablamos a distancia (identidad digital), así como firmar digitalmente documentos electrónicos con una validez jurídica equivalente a la que les proporciona la firma manuscrita.

A simple vista, el DNI electrónico es muy similar al tradicional. Su principal novedad es la incorporación de un pequeño circuito integrado (chip) capaz de almacenar de forma segura información y de procesarla internamente. Para poder incorporar este chip, el documento que nos identifica ha cambiado su soporte tradicional (cartulina plastificada) por una tarjeta de material plástico, dotada de nuevas y mayores medidas de seguridad.

Las claves privadas de cada ciudadano se encuentran almacenadas en el procesador de la tarjeta criptográfica de su DNI electrónico. Para acceder a ellas y al certificado de firma deberá emplear una clave personal de acceso (PIN), confidencial e intransferible, generada en el momento de recibir el documento.

Si usted aún no ha renovado su antiguo documento, siga las instrucciones que ofrece el Cuerpo Nacional de Policía en la web oficial del DNI-e. Y tenga en cuenta que para la utilización del nuevo DNI es necesario contar con ordenador personal y un lector de tarjetas inteligentes que cumpla el estándar ISO-7816. En cuanto al software, es preciso instalar una serie de módulos criptográficos que se pueden descargar aquí.

lunes, 21 de septiembre de 2009

La genial "Reactable" se llevó el premio de arte digital más importante del mundo

La mesa sonora, desarrollada por una universidad española, recibió en Austria el Golden Nica, el galardón más prestigioso a la creación digital. Fue desarrollada en 2003, pero alcanzó la popularidad el año pasado, luego de que sus creadores subieran varios videos a la Web.

Reactable es un instrumento, sencillo y complejo a la vez, que hace de la música algo tangible, visual, llamativo, participativo. Con una historia que se remonta al año 2003, la impresionante "mesa de sonidos" creada en la Universidad española Pompeu Fabra (UPF) recibió hoy en Austria el premio más importante del mundo en arte digital, el Golden Nica.

El galardón del festival Ars Electrónica de Linz, en la categoría de "Música digital" –algo así como un Oscar del arte electrónico-, quedó en manos del equipo creador de Reactable, encabezado por Sergi Jordà, del Grupo de Tecnología Musical de la UPF.

Reactable es una mesa luminosa, redonda y de color azul que interactúa con unas formas geométricas de plexiglás que, según su forma, posición y cercanía se convierten en imágenes y sonido que permiten crear estructuras sonoras complejas. El resultado de este particular alfabeto sonoro es en lo visual y lo musical tan estético como hipnótico.

El proyecto empezó a crecer en 2003 a partir de una idea: "Imaginemos el instrumento ideal para abordar la música hecha con una computadora", explicó Jordà.

El proyecto pasó de los circuitos de expertos a la popularidad callejera gracias a la Web. Una señal de su aceptación popular fue que una demo - subida hace un año- ya fue vista casi dos millones de veces.

Hasta ahora se vendieron cerca de una docena de mesas, que se encuentran en museos europeos y del Estados Unidos en su mayoría, pero ya proyectan su comercialización en 2009.







miércoles, 16 de septiembre de 2009

Antonio Escohotado: "Los griegos no tenían problemas con el sexo pero temían al alcohol”

Puede conversar de drogas psicoactivas con la misma naturalidad que lo hace de Aristóteles, de Newton o de economía. Antonio Escohotado nos recibe en su domicilio madrileño donde nos cuenta cómo evolucionaron los vicios y placeres carnales a lo largo de la Historia.


-La búsqueda del placer y el vicio han marcado la historia de la humanidad. Sin embargo, nuestra valoración moral sobre esos disfrutes ha ido cambiando con el paso del tiempo. ¿Por qué ha variado tanto en cada época?
-Ningún grupo humano ha prescindido de reglas morales, que apoyan esto y rechazan lo otro, si bien algunos de los grupos más duraderos han ido modificando esas pautas con el despliegue de su historia. La ebriedad y la cópula siempre se han tratado con singular preocupación, aunque Occidente fue acumulando experiencia –y tolerancia– en ambas esferas.

-Por lo que cuentan los clásicos, los antiguos atenienses no parecían tener ningún complejo en practicar libremente el sexo...
-Ciertamente, los griegos no tenían ningún problema con el sexo, porque no fueron ascéticos, pero les aterrorizaba el alcohol. Los jóvenes tenían prohibido beber, lo mismo que las mujeres, salvo que fueran cortesanas. Platón afirma que los viejos debemos hacer libaciones a Dioniso (entiéndase beber) cada vez más frecuentes, pues nada alivia en mayor medida las miserias de la senectud. Grecia fue un importante exportador de vino, y Dioniso (el Baco de los romanos) era un dios terrible, símbolo de lo irracional y salvaje. El mejor testimonio lo encontramos en Las Bacantes, la tragedia de Eurípides, donde Dioniso inspira canibalismo y parricidio.

-¿Los romanos tenían el mismo problema con el vino?
-Lo heredaron de los griegos. Durante la República, cuenta Tito Livio la triste historia de una mujer que fue sorprendida con las llaves de la bodega y condenada a no salir de allí hasta haber muerto de hambre. La costumbre se relajó al progresar el Imperio y el vino borró su estigma ancestral al identificarse con la sangre de Cristo en el rito de la misa. Como ocurre con otros vicios y placeres, nos fuimos acostumbrando y hacia el siglo XIII aparecieron los aguardientes, que multiplicaron las enfermedades venéreas no sólo en Europa sino en la China de Gengis Kan. Desde entonces, el alcohol ha sido un fiel compañero para buena parte de la humanidad.

-Volviendo a los griegos, ¿fueron ellos los que refinaron el arte de alcanzar una existencia plenamente placentera?
-Aquella cultura fue admirable. Grecia brilló dos siglos y luego acabó devorada por su propio éxito, que la llevó a entregar todo el trabajo a esclavos y entrar en una decadencia por recesión. Por lo que se refiere al sexo, los grandes problemas llegaron con el cristianismo, aunque los romanos ya habían prohibido con anterioridad los ritos báquicos. Livio cuenta que miles de personas fueron ajusticiadas por participar en ellos.

-¿En las bacanales se ingerían todo tipo de drogas?
-Por supuesto. Eurípides cuenta que Ulises dio de beber a Polifemo un vino tan fuerte que debía ser aguado en cuatro quintas partes, so pena de enloquecer. Quizá los cargaron con extractos de belladona, beleño, hachís, opio, cáñamo e incluso hongos. Lo mismo ocurría en las celebraciones de la gran institución religiosa griega, los Misterios de Eleusis, que persistió hasta la caída del Imperio Romano. La inefable impresión que el ritual causaba en sus peregrinos sólo puede explicarse por magia o por química. Entre sus iniciados se encontraban Platón, Aristóteles, Cicerón, Adriano o Marco Aurelio, todos ellos prototipos de sobriedad intelectual. Fueron los obispos cristianos de Alarico quienes destruyeron el santuario eleusino.

-¿Se conoce qué tipo de sustancia psicotrópica utilizaban en los Misterios de Eleusis?
-Investigaciones de Albert Hof- mann y otros demostraron que los iniciados en Eleusis pudieron consumir un brebaje preparado a partir del cornezuelo del centeno, que sigue creciendo allí en una variedad especialmente poco tóxica. Los sacerdotes eleusinos se llamaban hierofantes (“reveladores de lo sagrado”) y psicopompos (“los que ponen de manifiesto lo anímico”) e imponían a sus iniciados la llamada “reserva mistérica”. Todos juraban por su vida no revelar nada sobre el rito de iniciación. Pero no ya en Eleusis y en otros cultos mistéricos del Mediterráneo, sino en Asia, África y América es evidente que las comuniones religiosas previas al monoteísmo se hacían con hostias psicoactivas.

-Epicuro abogaba por una vida de continuo placer como clave para la felicidad. ¿Fue tanta su influencia en la Antigüedad?
-Epicuro alertó contra quienes viven de vender la vida eterna, y asustan con infiernos. “Sólo cabe temer –dijo– el dolor que acompaña al acto de estar vivo”. Por lo demás, el placer epicúreo, la hedoné, tiene mucho de severidad y matemática; el camino de una vida sensata consiste en evitar que placeres menores nos desvíen de placeres mayores. Evitar los excesos, incluso los copulativos. Imagínese un profesional del porno, que tras horas de trabajo acaba sintiendo incomodidad en las zonas evocadoras del supremo goce carnal.

-Los primeros cristianos debieron aborrecer el pensamiento de Epicuro.
-¿Qué hacer con alguien que tildaba de dementes y manipuladores a quienes metiesen miedo con el más allá? Durante el breve retorno al paganismo que representa Juliano el Apóstata sabemos por el propio Juliano que las obras de Epicuro ya eran difíciles de encontrar. Pero de los centenares de escritos de Demócrito, otro gran moralista ateo, tampoco ha quedado prácticamente nada. Gran parte de la memoria antigua desapareció con el incendio de Alejandría y de las demás bibliotecas públicas romanas.

-¿La irrupción de Roma como potencia mundial produjo grandes cambios en la moral y en la conducta sexual de los ciudadanos?
-Roma mantuvo vigente una norma –si no recuerdo mal, la Lex Escantinia– que preveía enterrar vivo al invertido sexual. Sin embargo, en Vidas de los Doce Césares, Suetonio menciona a emperadores pederastas como Tiberio en su vejez, emperatrices disolutas y orgías como las organizadas por Calígula y Nerón. Historiadores posteriores cuentan otro tanto de Cómodo y alguno más. Por ejemplo, Adriano fue sin duda homosexual. Las clases privilegiadas se permitían ciertas veleidades prohibidas al resto. A pesar de las abundantes historias libertinas de conocidos personajes históricos, como Mesalina, los romanos fueron sinceramente autoritarios en estas cuestiones, y quizá el pueblo más puritano de la cuenca mediterránea.

-Tras leer Yo Claudio, la famosa novela de Robert Graves, resulta difícil creer que los romanos eran unos redomados puritanos.
-La acusación de lujurioso –aplicada a césares, senadores, generales y aristócratas– aparece con alta frecuencia en los textos de los grandes cronistas romanos, como Livio, Salustio o Tácito. Lucrecia se suicida, recuérdese, porque Tarquino la amenaza con decir que ha sido descubierta fornicando con un esclavo. Por lo demás, todos los ciudadanos que tenían esclavas de buen ver dormían con ellas cuando querían. El peligro de que sus esposas hiciesen lo mismo era que el pater familias cargase con bastardos. Nerón se hacía traer rodaballos del Atlántico, sirviéndose de un carísimo sistema de transporte que destripaba caballos durante el día y conservaba por las noches el pescado en hornos de cal rellenos de nieve. Pero el viaje duraba al menos una semana. Sin duda, Nerón digería un género que para nosotros sería infecto. En aquel tiempo, la plebe romana vivía de vales de economato, como ahora en Cuba, y esos dispendios resultaban tanto más odiosos para el moralizante historiador romano.

-Sorprende que la modernidad y el desarrollo tecnológico no hayan impedido la existencia de sociedades intransigentes y autoritarias.
-Me parece que sí han reducido notablemente la intransigencia. Obsérvese, con todo, que entre las dulzuras del sexo está la amargura de verse influido por factores como la belleza física, la elocuencia y otras variantes de la gracia humana. Hay por eso mujeres y hombres que jugaron y juegan con ventaja. Las sociedades poco permisivas y las muy represivas complacen a un sector de población que por una u otra razón se siente menos favorecido o en desventaja.

-¿Cómo afronta el mundo islámico ese deseo humano de sublimar los placeres carnales?
-Mahoma promete a sus fieles que si son justos tendrán todas las huríes que puedan pagarse en la vida, y más aún en el paraíso. Su religión se cuida de ofrecer placer carnal eterno y muchos islámicos tienen todavía harenes. Con el paso del tiempo se han ido haciendo más estrictos, sobre todo por la presión del resto del mundo que les afea la poligamia y el situar a la mujer en un plano inferior al del hombre.Pero ellos no tienen grandes problemas con el sexo, al menos mientras tengan medios de vida para comprarse sus esposas.

-Sin embargo, son muy rígidos con el alcohol.
-Mahoma murió de una forma imprevista y no dejó claro qué hacer con el alcohol. Sus sucesores llegaron a la conclusión de que quizá no era en sí malo, pero pensaron que sus consecuencias resultaban muy negativas porque inducía a los consumidores a hacer tonterías y a mentir para justificarlas o negarlas. Mentir sí es contrario a la ley divina y para prevenirlo parece que se decidió castigar al ebrio con algunos bastonazos.

-¿Y cuál es la actitud del mundo islámico con otras drogas?
-Hay cierta permisividad con unas y severidad absoluta con otras. Por ejemplo, el opio, cuyas tabletas llevaban estampado tradicionalmente el lema “regalo de dios” (“mash Allah”), circuló intensamente por el mundo islámico hasta mediados del siglo XX, y hasta los años sesenta el Parlamento iraní tenía un fumadero, de la misma forma que el nuestro tiene un bar. Por el contrario, el hachís, tan arraigado en la zona del Rif, se consideró una droga de truhanes en otros países árabes. Me parece que la ley islámica ha llegado a la conclusión de que cualquier agente embriagante puede ser igual de nocivo que el alcohol, pues su consumo podría incitar a las personas a un descontrol que provocaría conductas “inadecuadas”.

-Resulta curioso que en Persia surgiera un personaje como Omar Khayyam, que no tuvo reparos en escribir el siguiente poema: “Puesto que ignoras lo que te reserva el mañana, esfuérzate por ser feliz hoy. Coge un cántaro de vino, siéntate a la luz de la luna y bebe pensando en que mañana quizás la luna te busque en vano”.
-Omar Khayyam era un epicúreo, aunque también se le puede interpretar como un místico al estilo de San Juan de la Cruz o Santa Teresa. En ese sentido, el vino sería un símbolo para estar divinamente poseído. Roumi, quizá el lírico islámico más destacado de todos los tiempos, habla también de la ebriedad de lo absoluto. Siendo persa y sufí como Khayyam, es un poeta báquico pasmado ante la belleza del mundo y la generosidad de su creador.

-En su opinión, ¿qué papel ha jugado el cristianismo en la represión de los placeres carnales?
-Para comprender el papel de la Iglesia en esa particular historia hay que tener en cuenta el Sermón de la Montaña, donde antes de bendecir a los pobres materiales, a los afligidos y perseguidos, Jesús dirige su primera bienaventuranza a los “pobres de espíritu”. El dios protocristiano ama precisamente la desposesión física y quiere vengar los dones naturales. Toda forma de riqueza –empezando por la de espíritu o sabiduría– le sugiere soberbia e impiedad. Sus elegidos son los crédulos o “niños“, y Tertuliano –el más elocuente apologeta inicial– se regocija imaginando que Homero, Aristóteles, Virgilio y Horacio se tuestan eternamente en el infierno, purgando lo que san Agustín llamará poco después “malsana curiosidad científica”. Amar a dios es odiar la realidad física.

-Ese odio a la realidad física choca frontalmente con la conducta sexual de algunos pontífices del Renacimiento. El Papa Alejandro VI, un Borgia de origen hispano, hizo las delicias de los anticlericales de la época por sus continuos líos de faldas.
-¿Y qué me dice de la papisa Juana, que quedó embarazada y parió durante una ceremonia? Pero estas cosas no merecen en realidad mención. Ocurrieron igual en el Imperio Romano y en todos los reinos ulteriores, y me parece mucho menos espantosa una doble vara de medir que cierta conformidad impuesta a todos sin excepción. Allí donde la excentricidad no se admite, la salud social resulta imposible.

-En su último libro, Los enemigos del comercio, usted dice que los comunistas no inventaron nada, que en el fondo se inspiraron en los cristianos.
-Los comunistas ateos nunca lo han reconocido. Marx dice en su Manifiesto (1848) que la clase obrera está condenada a una miseria creciente si no acaba con la “anarquía” productiva, aunque la industrialización produjo lo contrario de una miseria en aumento y la economía planificada ha creado siempre miseria. No me diga que ambos pronósticos carecen de un nexo con la justicia social apostólica, a cuyo juicio la propiedad privada es un robo y el comercio su instrumento perfecto.

-¿El comunismo era puritano?
-Una dictadura –incluyendo la proletaria– aspira por principio a la omnipotencia. Tal como debe abolir la anarquía el intercambio económico libre debe hacerlo con cualquier otro reducto de privacidad. Todo el mundo debe estar bajo la supervisión del Comité Central, delegado a su vez en el Gran Hermano. Por lo demás, a finales del siglo XIX los comunistas del SPD alemán eran muy progresistas en materia de conducta sexual, e incluso alguno sugirió una comunidad de cuerpos y no sólo de bienes. De ellos viene suprimir el adulterio y el aborto como delitos, pero la gran mayoría de esos comunistas se negó a apoyar el leninismo, y allí donde el leninismo logró imponerse cundió la sumisión de todos a alguna normalidad arbitraria.

-¿Se siente usted una persona epicúrea?
-El ignorante sigue ligando epicureísmo con orgías y ebriedad incontrolada, aunque sea una ética de sencillez casi puritana. No reniego de Epicuro, pero es un moralista bastante más limitado que su maestro, Aristóteles, a quien por cierto venero. La matemática epicúrea del placer –en última instancia, no dejar que el corto plazo nos vele el largo– es, por otra parte, un buen compañero para experimentar con toda suerte de cosas capaces de convertirse en dolores, como los afectos, las ideologías y las sustancias psicoactivas, donde ser incauto y tener baja la propia estima lo paga uno convirtiéndose en una piltrafa o un fanático. Siempre existe un justo término medio.

-¿Por qué decidió probar cerca de 140 sustancias psicoactivas?
-Niego haber probado más de diez o doce matrices químicas, con sus correspondientes mezclas. Mi interés original fue abrirle una ventana al conocimiento, influido ante todo por Aldous Huxley. El primer ácido lo tomé en 1964, cuando era un fármaco de psiquiatras.

-Casi a la vez que lo descubrieron los hippies...
-Siempre digo que Sánchez Dragó y yo somos los únicos hippies supervivientes del país. Pero cuando hablo de esa cuerda excluyo a macrobióticos y buscadores de gurús, por más que recuerdo con cierto rubor algunos de nuestros disfraces de entonces. Viví trece años en Ibiza, cuando dio la casualidad de que aterrizaba en la isla mucha gente atractiva, y todo era barato para quien se aviniese a la incomodidad de vivir sin luz eléctrica ni otra agua que la del pozo. Hubo mucha autodestrucción dentro de los trajes floreados, pero las épocas de entusiasmo no abundan, y de aquel experimento vive todavía la isla.

-Usted es un filósofo experto en Aristóteles, que lleva años estudiando la Teoría del Caos y ha escrito multitud de textos sobre pensamiento humano, economía y drogas. ¿Por qué cree que este último aspecto de su bagaje académico es el que ha logrado más resonancia social?
-Seguramente porque es el que más morbo despierta. Me siguen rayando a veces el coche, como si de mí dependiese que otro sea adicto o muera de sobredosis, y alguna vez me lo han dicho desde el coche o la moto contigua, mientras esperábamos que un semáforo se abriese. También me han aplaudido por ofrecer información al respecto.La discreción es una virtud que lamentablemente descubrí tarde, y si pudiera volver al pasado no le quepa duda de que sería más cauto, por no decir en realidad menos arrogante. Sin embargo, no he mentido, que yo sepa. Y como tampoco puedo cambiar lo que ya fue, oigo con paciencia a quien me grita: “¡Debería haberse muerto hace unos cuarenta años!” (Grandes carcajadas).

Fernando Cohnen

De Muyint.

martes, 15 de septiembre de 2009

Festival de Psy-Trance en Córdoba, Argentina

Utopía
Otro mundo es posible
Hermanos y hermanas, estimados pasajeros de la Nave Espacial Madre Tierra, los quiero invitar a que dejen todas sus responsabilidades, abandonen todas las tareas productivas, dejen el zapping, desconecten el messenger y saquenle la batería al celular.
9, 10, 11 y 12 de Octubre
4 dias de campamento psicodelico
Se llama Festival Utopía, vengan a surfear la psique, a derribar los límites entre sujeto y objeto. A SER MÚSICA en una meditación activa colectiva y a entregarle nuestros sentidos a Psykovsky (Russia) y a una selección de alto vuelo de live acts, de brujos más experimentales del chamanismo electrónico.
Más info , entradas anticipadas (quedan pocas)
152-832-573
Para servirle parcero

Utopia Psychedelic Trance Festival 9 10 11 12 - OCTUBRE 2009 Cordoba, Argentina
La utopia es la verdad de mañana,
Las utopías no son más que verdades prematuras
Y nuestra verdad es que al mundo
Lo vamos a cambiar..
Mujeres y hombres de esta tierra,
Otro mundo es posible,
Otro mundo diferente,
Justo si y sin miedo de su gente
La utopia es algo que no existe hoy pero puede existir mañana, seamos coherentes, pidamos lo imposible, que el mundo se puede cambiar.
Otro mundo es posible
No nos caben dudas que en estos tiempos de incertidumbre humana y crisis ambiental, el hombre se está replanteando su lugar en el mundo, y buscando recuperar los vínculos ancestrales y fundamentales con su entorno natural-cultural. En esa búsqueda la utopía de que otro mundo es posible deberá ser nuestra brújula y guía que nos llevara en primer lugar a parar la locura del sistema, que es la única manera de garantizar un futuro para nuestros hijos, y luego ya veremos como sigue esa utopia, ya que la utopia no es algo estático es algo que muta y avanza a medida que se transita.
Sabemos que con una celebración o festival no vamos a cambiar el mundo pero tal vez escuchemos el sonido que esta utopia hace al crecer.
Los esperamos el próximo fin de semana largo del 12 de octubre para vivir la utopia de pasar 4 días de celebración al aire libre, en el planeta tierra juntos como hermanos bailando por nosotros por la tierra por el amor y la utopia de que otro mundo es posible.
Paz y amor, unión.


¡Qué envidia!

Más pertinaz que el odio, más intensa que los celos y antigua como el hombre. Así es la envidia, una pasión universal que nadie reconoce sentir.


Apenas unos segundos después de que el fonógrafo de Edison dejara de emitir en la sala sus primeras palabras, uno de los académicos que asistía a la presentación del aparato, el francés Jean Bouillaud, de 82 años, saltó de su asiento, agarró por el cuello al infeliz que lo manejaba en ese momento y comenzó a zarandearlo mientras profería que aquello era una farsa, un truco de ventrílocuo y que la noble palabra humana no podía ser reemplazada por un metal. Bouillaud no se había vuelto loco ni había sufrido un ataque de ansiedad. En absoluto. Se trataba de un caso de envidia entre colegas, un sentimiento tan viejo como el hombre del que se ha dicho que es el más vergonzoso de los vicios. De hecho, se le considera tan deshonroso que incluso personajes tan ilustres como el filósofo Francis Bacon no han dudado en afirmar que la envidia es un “gusano roedor del mérito y la gloria”. La Real Academia Española, más tibia en su definición, la considera un “pesar del bien ajeno”.

La envidia es un fenómeno universal, pero ni es considerada por los psicólogos una de las emociones fundamentales, ni existe una expresión facial que la caracterice de forma exacta. En su obra La fuerza de las emociones, los psiquiatras Christophe André y François Lelord indican que esto se debe a que “a diferencia de lo que ocurre con otros sentimientos, comunicar la envidia nunca ha supuesto una ventaja evolutiva”. En efecto. La envidia es un tabú social que se lleva en silencio porque, en el fondo, supone una declaración de inferioridad que no conviene revelar en público. Plutarco ya daba cuenta de ello hace casi 2000 años. En su estudio Sobre la envidia y el odio, el genial biógrafo y ensayista griego resaltaba que “nadie dice que es envidioso”, sino que para justificar ese sentimiento se alegan todo tipo de excusas. Este comportamiento, según el sociólogo de la Universidad Libre de la Lengua y la Comunicación de Milán Francesco Alberoni, se debe a que la envidia es, en esencia, “una reacción ante el reconocimiento de una derrota”.

En un intento por negar la frustración que nos produce, nos comportamos de muy distintas formas. Algunas personas optan por imitar a quienes envidian; otras, si se ven incapaces de alcanzar el mismo objetivo, se deprimen y, por último, un tercer grupo de individuos se decanta por criticar e incluso conspirar contra quienes les han superado. Todo depende de la importancia que se dé al objeto de nuestra envidia y, sobre todo, de quién sea el envidiado.

Envidiamos cuando comprobamos que otro se ha hecho con algo que deseamos intensamente o cuando otra persona logra lo que nos es imposible realizar. El resultado, en cualquier caso, es que nuestra autoestima se resiente. Los psicólogos señalan que para compensar esta pérdida, que nos resulta insoportable, hemos desarrollado una serie de mecanismos muy particulares. Uno de ellos es infravalorar la ventaja del otro, esto es, nos autoconvencemos de que lo que ha conseguido “no es para tanto”. Otras tácticas pasan por buscar desventajas en otros campos que compensen su superioridad, desvirtuar a la otra persona en su conjunto o criticar el sistema que permite que se dé semejante situación. En los casos más extremos, podemos llegar a castigar –tanto física como psicológicamente– al envidiado por su ventaja.
Esto es así, según Alberoni, porque “el envidioso desea acercarse al envidiado, ser reconocido por él, identificarse con él y sustituirlo”. En los casos patológicos, el envidioso sólo puede hallar satisfacción en la destrucción completa del envidiado, en su desgracia total e incluso en su desaparición física.

La investigadora Melanie Klein, autora de Envidia y gratitud, una obra considerada básica por numerosos expertos en este terreno, indica que la envidia trae implícito el deseo de hacer daño.Se trata, además, de una actitud inherente a los seres humanos y que se desarrolla en las primeras etapas de la infancia, un dudoso honor que parecemos disfrutar en exclusiva. Según Juan Carlos Senar, de la Sociedad Española de Etología, “no hay constancia de que entre los animales se dé un fenómeno semejante, aunque éstos pueden utilizar mentiras y engaños para alcanzar objetivos”.

En un artículo sobre la Psicología de la envidia, el doctor Cecilio Panigua indica que la envidia “es un eco de los sentimientos de inferioridad y rivalidad sufridos por el niño durante su desarrollo psicológico, con padres y hermanos, lo que explica su universalidad e irracionalidad”.Este factor de proximidad –del niño con los que le rodean– parece especialmente importante en el desarrollo de la envidia. Así, cuanto más cercanas a nosotros sean las personas que envidiamos y cuando su superioridad se demuestra en los campos que más valoramos, el sentimiento de envidia crece. Por el contrario, éste no se desarrollará fácilmente entre personas que no se conocen apenas o entre quienes hay un abismo insalvable temporal o profesional. Por ejemplo, es más que dudoso que un físico actual pueda albergar sentimientos de hostilidad contra Einstein o Newton por los éxitos que éstos cosecharon en su mismo campo.

Puesto que la envidia se acentúa entre personas que viven circunstancias parecidas, es entre los hermanos y los compañeros de profesión donde es más relevante. Ignazius Semmelweis fue el protagonista de uno de los casos más vergozosos de envidia profesional. A mediados del siglo XIX, este médico obstetra del Hospital General de Viena observó que un alto porcentaje de parturientas moría tras dar a luz por fiebre puerperal, mientras que en otros hospitales, donde atendían comadronas que cuidaban su aseo y mantenían la limpieza, ese porcentaje era sensiblemente inferior. Cuando propuso que los médicos que atendían los partos se lavaran las manos con cloruro de calcio para evitar así infecciones, fue despreciado. Aún peor. Incluso cuando demostró que su -teoría era correcta, su descubrimiento siguió siendo tachado de ridículo.

Semmelweis no quería exhibir sus méritos, pero es cierto que a veces el envidiado puede vanagloriarse de ellos y hacerlo de forma que se ofenda el otro. En ese caso se trataría de una provocación. En su novela Abel Sánchez –toda una tesis sobre la envidia–, el filósofo y escritor Miguel de Unamuno señala que “no hay canalla mayor que las personas honradas (...) No me cabe duda de que Abel restregaría a los hocicos de Caín su gracia”. Precisamente, en el Génesis se describe un episodio que ilustra hasta qué punto puede llegar la envidia entre hermanos cuando uno de ellos hace gala, aunque sea inconscientemente, de sus virtudes superiores. En el capítulo 37 de este texto bíblico se describe cómo José, el favorito de Jacob, su padre, era profundamente envidiado por sus hermanos. Quizá tenían buenas razones para hacerlo. José no sólo disfrutaba de un físico favorecido, sino que estaba colmado de virtudes, entre ellas el don de la profecía. Además, sabía cómo resaltar lo mejor de sí mismo. Tanto fue así que todos sus hermanos, salvo Rubén, que se manifestó en contra, decidieron asesinarle. Otro de los hermanos, Judá, propuso otra idea mejor: venderle como esclavo.

En realidad, quizá José alardeaba a propósito de sus habilidades. Pero aunque se exhiban adrede los buenos atributos para producir envidia, este sentimiento no es tan profundo como cuando el éxito que se observa en el envidiado nos parece inmerecido. En ese caso, la hostilidad se dispara y la envidia da paso al rencor.

Los psicólogos saben que el sentimiento de envidia aumenta enormemente cuando comprobamos que la circunstancia que la desencadena choca, además, con nuestro sentido de la justicia. Esto es lo que ocurre, por ejemplo, si descubrimos que un compañero de trabajo ha obtenido un ascenso al cual optábamos no sólo inmerecidamente, sino que, a nuestro juicio, porque está en más que buenas relaciones con la hija del presidente de la compañía.En la historia de la filosofía, una cuestión recurrente ha sido si en los sentimientos de envidia se encuentran los fundamentos del sentido de justicia. Freud afirma, de hecho, que ésta emana de los deseos de los envidiosos. Así, en un grupo familiar, los hermanos observarían la conducta de los demás guiados por la envidia, de forma que ninguno de ellos sea más favorecido que otro por sus padres. En definitiva, si uno no puede ser el preferido, ninguno debería serlo.

A la vista de lo universal de este sentimiento, algunos expertos se han preguntado si es posible que sus causas sean más biológicas que psicológicas.Según el biólogo molecular John Medina, autor de El gen y los siete pecados capitales, “analizar la biología de la envidia es un problema insuperable, porque no se ha aislado un gen responsable de este sentimiento ni se ha identificado una región del cerebro dedicada a la envidia”.

Medina indica que esto puede explicarse bien porque nuestra tecnología no es suficientemente buena o bien porque “la envidia sólo es un intento de organizar sentimientos subjetivos que no tienen correlación biológica”. En este sentido, señala que “la envidia está asociada a cuatro tipos de comportamiento: los asociados al deseo sexual, a la avaricia, a los deseos de agresión y como una reacción a la depresión que, en definitiva, puede ser tanto un componente como una respuesta a la envidia”. Este vínculo entre un sentimiento subjetivo –la envidia– y un proceso biológico –la depresión– es, para este autor, más estrecho de lo que suponemos. Tanto es así que, aunque Medina asegura que no existen píldoras contra la envidia, sí es posible que los antidepresivos nos mantengan a salvo de ciertos aspectos negativos asociados a ella.

¿Pero hasta qué punto podemos llegar a fastidiar al prójimo por envidia? Un equipo de economistas de las universidades de Oxford y Warwick, en Inglaterra, comprobaron que se puede ir muy lejos. En un experimento, los profesores Andrew Oswald y Daniel Zizzo adjudicaron aleatoriamente una cantidad de dinero a distintas personas que se iba incrementando con el tiempo. En el ensayo, cada una de ellas podía destruir parte del dinero ajeno, pero sólo a costa de sacrificar parte del propio. Para sorpresa de los investigadores, la mayoría de los participantes llegó a deshacerse de su fortuna sólo para conseguir que los demás no se enriquecieran más que ellos.

Y es que, ya lo decía Don Quijote: “Todos los vicios, Sancho, traen un no sé qué de deleite consigo; pero el de la envidia no tal, sino disgusto, rencores y rabias”.

Abraham Alonso

lunes, 14 de septiembre de 2009

Cómo terminar con la educación de segunda

Sólo una revolución pedagógica que incorpore la telemática nos permitirá tener educación masiva de calidad.

Por: Rodolfo Terragno
Fuente: ESCRITOR Y POLITICO

Harvard, Yale, Cambridge, Oxford y Caltech son -según el autorizado ranking THE/QS- las cinco mejores universidades del mundo.
En la Argentina, resultarían "chicas". Yale tiene 5.247 alumnos. La UBA, 358.071. Uno de los datos que explican la diferencia: en Yale hay que pagar 36.500 dólares por año; en la UBA, nada.
La educación masiva y gratuita es una bendición. Pero, ¿cómo evitar que sea de segunda?
Hasta ahora, fue difícil. Una facultad abarrotada podrá tener un instituto o un curso de jerarquía; pero su calidad media será, inevitablemente, baja. No cuesta entender por qué. Albert Einstein puede tener 30 discípulos; pero no 30.000. Y no existen 1.000 profesores de Física que puedan compararse con el hombre que halló la fórmula E = mc2.Durante años, la ecuación fue: más alumnos, menos calidad. Ya no. Una revolución pedagógica, unida a la telemática, hizo posible la educación distribuida. Hoy, Einstein podría dictar clases a millones, ayudado por gráficos, animaciones y videos. Los estudiantes elegirían cuándo y dónde verlo. Cada uno lo tendría en su notebook, televisor, MP4 o iPod. O lo encontraría en el desktop de un locutorio.
Ninguno sería un receptor pasivo. Con la educación distribuida, los alumnos deben realizar trabajos prácticos -corregidos por un sistema computarizado- y navegar por la inmensa bibliografía de la que disponen.
Los 12.500.000 libros de papel que posee Yale ya no son un privilegio. Bibliotecas digitales como Flat World Knowledge, Questia, JSTOR, Proyecto Gutenberg o Miguel de Cervantes proveen libros y trabajos académicos que pueden bajarse a cualquier soporte. Incluso a dispositivos que imitan libros reales: sus delgadas pantallas flexibles, no iluminadas, son como hojas, en las cuales la "tinta electrónica" acentúa el "efecto papel".
Los estudiantes no aprenden en soledad. Si viven lejos de la universidad, asisten semanalmente a una subsede, donde reciben el apoyo de tutores, se relacionan entre sí y dialogan con otros profesores mediante videoconferencias. Todos ellos rinden, a su debido tiempo, exámenes presenciales.
Los costos de estudiar con apoyo electrónico son casi nulos para jóvenes que viven ligados por Facebook, juegan con PlayStation y bajan videos o música.
La tecnología permite, de este modo, masificar la excelencia; pero el proceso no está exento de riesgos.
Así como la Encyclopædia Britannica no sustituye a la universidad, no lo hace la Internet. Una y otra son formidables complementos. Las universidades del futuro no tendrán grandes edificios, pero deberán sistematizar la enseñanza superior, fijando secuencias de estudio, escogiendo profesores, evaluando alumnos y otorgando diplomas. El primer peligro es la facilidad con la que cualquiera puede montar -con mínimo costo- una "universidad virtual". El ciberespacio está poblado de materiales didácticos gratuitos, que pueden ser capturados y organizados arbitrariamente. YouTubeEDU o iTunesU permiten subir y bajar clases universitarias filmadas. Más aún, existe el OpenCourseWare (OCW), ideado por Nicholas Negroponte, al cual adhieren varias universidades. Cursos enteros son colgados en la red, para que se los baje gratuitamente.
El Instituto Tecnológico de Massachussets (MIT) ya puso en OCW 1.900 cursos. Usadas con irresponsabilidad, esas nobles iniciativas dan lugar a sistemas precarios de educación a distancia. El valor de un título dependerá ahora, más que nunca, del prestigio que tenga la universidad otorgante.
La educación superior argentina enfrenta otro peligro. Si no se ofrece alta calidad, los alumnos más exigentes iniciarán una migración virtual a Harvard, Salamanca o la Sorbona. Salvo en las carreras que otorgan títulos habilitantes, les dará lo mismo estudiar en la Argentina o, desde aquí, en prestigiosas universidades ubicadas a miles de kilómetros. Yale se ha propuesto convertirse en una "universidad global" y el proyecto tiene el impulso de un latinoamericano: Ernesto Zedillo, ex presidente de México.
La globalización educativa tiene ventajas y desventajas. Además de proveer conocimientos generales, una universidad contribuye al fortalecimiento de la identidad nacional. Un modo de conciliar el pro y el contra es el propuesto por Whitney International University System (WIUS): una red de instituciones privadas, cada una de las cuales diseña sus propios programas de estudio. Hoy, nuestras universidades nacionales pueden ser masivas y ofrecer alta calidad. Para eso necesitan dos cosas. Una, admitir que la revolución tecnológica es irreversible. Dos, provocar un cambio copernicano en el modo de enseñar.
El psicólogo y tecnólogo David Wiley sostiene que "si las universidades no encuentran la forma de innovar y adaptarse a los cambios que se están dando en su derredor, hacia 2020 serán irrelevantes". Adaptarse no significa olvidar los viejos métodos sino combinarlos.
Barack Obama tiene como subsecretaria de Educación a Martha Kanter, que lideró una Comunidad de Recursos Educacionales Abiertos vía Internet. Sin embargo, a sólo 28 días de haber asumido la presidencia de Estados Unidos, Obama promulgó la ley que asignó 100.000 millones de dólares a la mejora de la enseñanza formal en todos los niveles.
Mis propuestas: Ley Nacional de Enseñanza Distribuida. Homologación de las aplicaciones a emplear. Presupuesto para el desarrollo del sistema. Adaptación de los planes de estudio. Capacitación de profesores en el uso de los nuevos recursos. Incorporación de la figura de tutor a la carrera docente. Formación de redes universitarias con subsedes en todo el territorio nacional.
Objetivo: una educación masiva, de alta calidad que alcance a los lugares más recónditos.

De Clarín.

domingo, 13 de septiembre de 2009

Arte

La palabra arte proviene de un antiguo vocablo de origen pre-helénico (“artao”), que viene a significar “aquello que debe ser juntado, unido” o “algo que une”. De esta manera, en sus orígenes, el Arte sería todo aquello que tiende a unir partes separadas. Pero, ¿a qué tipo de partes nos referimos?. Principalmente, el arte une al creador con su obra, con él mismo y con todo aquel que accede a la misma. De este modo al arte podría comprenderse como un modo de comunicación que sigue unos patrones algo particulares, dependiendo del tipo de obra a la que nos refiramos. Por ejemplo: en la música, será el sonido; en la pintura, los materiales pictóricos; en la danza, el movimiento…, etc.

Pero en la obra de arte también está la historia, lo religioso, lo económico, lo político, el momento cultural, lo institucional,... Se podría decir que el arte es un testigo que da cuenta de las distintas épocas de la vida del hombre.

Bien es cierto que en algunos artistas no existe ese vínculo social, pero al hombre no le es posible escapar al entorno cultural en el que se desarrolla. Tenemos ejemplo de esto en la Historia del arte, en la que se estudia la trayectoria de muchos artistas que se sumergieron tanto en su propia interioridad, que el legado que transmitieron fue su misma intimidad, sus características singulares. Y creo que un grupo significativo de ello son los pintores surrealistas (como Salvador Dalí…), tan relacionados con los temas vinculados al Inconsciente. Este vínculo con la interioridad podemos encontrarlo también en la literatura, en la música, etc.

La fantasía a la que nos referimos en el arte tiene su parte inconsciente y su parte consciente, y éstos están básicamente ligados a la técnica en la que toda obra de arte se sostiene, ya que sin ésta no podría componerse la misma y adquirir su “status”. El arte tiene un cierto “status”, ya que perdura a lo largo del tiempo, y forma parte indisoluble de nuestra vida cotidiana.

El arte es una necesidad, y existen muchas formas del mismo, no el mero arte plástico que a todos nos viene a la cabeza cuando mencionan este concepto. Ejemplo de ello es el arte de la comunicación, de sostener la paz, de los valores éticos y morales. Y todo tipo de arte cae a menudo en oscuros abismos. Esto es así por que todos y cada uno de nosotros puede hacer de su vida un “algo” creativo, al servicio de nosotros mismos y de los demás. Por eso el arte estaría al servicio de la misma vida.

La relación entre el arte y los procesos de internalización humana constituyen uno de los instintos más remotos, y esa interdependencia profunda ha estado significando una gran fuente de saber, sobre todo en aquellas ciencias que, como la psicología, integran el vasto campo de las "humanidades".

La Psicología del arte es un campo en plena expansión, que ha aportado una gran variedad de conocimientos significativos, entre ellos la relación del arte con las psicopatologías, las diferentes personalidades, comportamientos diferenciales, etc.

El arte es un componente más (e indispensable) de las culturas, proponiéndose dentro de cada cual investigaciones que suelen relacionar el arte con los componentes sociales, analizando también diversos momentos históricos y problemas de la sociedad en la que se encuentre integrado, ya que en una sociedad el arte es tan necesario como los lazos sociales o los procesos de subjetivación.


Arte-terapia
Multitud de psicoterapeutas han podido comprobar los efectos curativos del arte, a nivel individual y también grupal. Las personas que reciben este tipo de terapia valoran mucho las incursiones artísticas, y para el profesional, además de ampliar y enriquecer sus recursos, puede reorientar y darle otro sentido al trabajo realizado hasta el momento.

El arte libera la subjetividad de la persona, se puede utilizar para la resolución de conflictos, poniendo el énfasis en que se trata de una experiencia individual, pero con la posibilidad de crear lazos de comunicación con los iguales. La sensibilidad artística permite expresarse a la persona tal cual es, sin los efectos del orden social.

Arte-terapia es la nominación genérica de un área que incluye aquellas prácticas psicoterapéuticas que utilizan la expresión artística como mediación. Tiene como base una concepción de arte vigente a partir de la post-guerra y que niega por completo el clásico mito del artista como un genio que vive fuera de los límites de la normalidad en su tiempo. De hecho, esta área ha tenido un gran desarrollo en la segunda mitad del siglo pasado y variados ámbitos de los servicios sociales: educadores, asistentes sociales, psicólogos, etc., acuden a los trabajos y técnicas artísticas en la actualidad como elementos que enriquecen aquellos recursos orientados hacia el cambio de la conducta subjetivada y las conexiones sociales.

martes, 8 de septiembre de 2009

La cara oculta de facebook.



LASTIMOSAMENTE LAS COSAS BUENAS QUE UNOS HACEN, OTROS LA APROVECHAN PARA HACER EL MAL...
Esta semana en la televisión hubo reportaje todos los días con Joaquín López Dóriga (periodista mexicano) sobre Facebook, Hi5, Myspace, Sonico, etc y lo peligroso que son. Viene un reportaje diario en el periódico MILENIO, sobre como los secuestradores tienen como fuente de información directa y confiable los blogs, el Facebook y el Hi5.
Entrevistaron a unos secuestradores y dicen que entran a la red y ven los ROSTROS, la casa, los carros, las fotos de viaje y saben el nivel social y económico que tienen quienes ahí aparecen. Ya en televisión uno de ellos había declarado que antes batallaban mucho para reconocer a los candidatos a secuestros, pero que ahora con el Facebook y la información que ponemos voluntariamente en la red, ya no se confunden ni tienen que investigar en donde viven o en que escuela estudian y a donde viajan y quienes son sus papas, hermanos y amigos. Eso pasó con Alejandro Marti, (Joven mexicano muerto por sus secuestradores) que de todo ponía. La familia acaba de cerrar su blog después de darse cuenta de la cantidad de información potencialmente peligrosa que el joven había puesto ahí con alegría y sin sospechar que estaba armando a quienes lo mataron.

LA VERDAD SOBRE 'FACEBOOK'
Facebook está vendiendo la información de sus usuarios al mejor postor. Cito textualmente: 'Lo que muchos usuarios no saben es que de acuerdo a las condiciones del contrato que virtualmente asumen al hacer clic en el cuadro 'acepto', los usuarios le otorgan a Facebook la propiedad exclusiva y perpetua de toda la información e imágenes que publican.'
De hecho, resalta el experto, los afiliados 'automáticamente autorizan a Facebook el uso perpetuo y transferible, junto con los derechos de distribución o despliegue público de todo lo que cuelgan en su página Web.' Los términos de uso le reserva a Facebook el derecho a conceder y sub-licenciar todo 'el contenido del usuario' a otros negocios.
Sin su consentimiento, a muchos usuarios les convirtieron sus fotografías en publicidad, transformando un comercio privado en endosos públicos.
De repente todo lo que sus afiliados publicaron, incluyendo sus fotografías personales, su inclinación política, el estado de sus relaciones afectivas, intereses individuales y hasta la dirección de la casa, se envió sin su autorización expresa a millares de usuarios.
Hay que creerle a Mr. Melber cuando asegura que muchos empleadores gringos al evaluar hojas de vida revisan Facebook para conocer intimidades de los solicitantes. La prueba que una página en Facebook no es para nada privada se evidenció en un sonado caso donde la Universidad John Brown expulsó a un estudiante cuando descubrió una foto que colgó en Facebook vestido de travesti Otra evidencia sucedió cuando un agente del Servicio Secreto visitó en la Universidad de Oklahoma al estudiante de segundo año Saúl Martínez por un comentario que publicó en contra del presidente.. Y para colmo de males, el asunto no termina si el usuario se decide retirar Aun cuando los usuarios cancelan la membresía, sus fotos e información permanecen abordo, según Facebook, por si deciden reactivar su cuenta Es más, el usuario no es retirado inclusive cuando fallece. De acuerdo a las 'condiciones de uso,' los dolientes no pueden obligar que Facebook descuelgue los datos e imágenes de sus deudos, ya que cuando el finado aceptó el contrato virtual le otorgó a Facebook el derecho de 'mantenerlo activo bajo un status especial de conmemoración por un período de tiempo determinado por nosotros para permitir que otros usuarios puedan publicar y observar comentarios sobre el difunto.'
Sepan los usuarios de Facebook que son partícipes indefensos de un escenario, los académicos califican como el caso de espionaje más grande en la historia de la humanidad. De paso se convierten de manera inconsciente en los precursores del fenómeno de 'Big Brother' te está observando.
Alusión directa a la intromisión abusiva del estado en los asuntos privados del ciudadano común para controlar su comportamiento social, tema de una novela profundamente premonitoria escrita en 1932 por el británico Aldous Huxley: 'Un Mundo Feliz.'

Michael Moore estrenó un documental en el que critica el capitalismo

El director y activista político presentó en el Festival de Cine de Venecia "Capitalism: a love story" en el que arremete contra bancos y empresas.

El realizador estadounidense Michael Moore volvió a mostrar hoy en Venecia su lado más ácido y efectista con Capitalism: a love story, su nuevo documental en el que arremete, en un momento fácil de crisis económica, contra los bancos y las multinacionales. Moore fue recibido entre aplausos en la sala de prensa -e incluso con una pancarta que decía "Michael, we love you"-, donde se mostró de lo más comedido y en su corta comparecencia tan sólo criticó a "ese líder loco que hay en Italia" y alertó a los europeos del riesgo de imitar a Estados Unidos.

"Esta película es muy relevante para Europa. Ustedes están experimentando el resultado del colapso económico, que no es solo en Estados Unidos", dijo Moore. Ya que, explicó, el documental es un ejemplo de los daños sufridos en Estados Unidos por el capitalismo salvaje, "cuanto más intentéis comportaros como nosotros, más difícil va a ser para vuestras sociedades".

Unos efectos, los del capitalismo, que han llevado a la ruina a muchos hogares norteamericanos, como refleja Moore en su documental, en el que culpa de la situación actual a los ex presidentes de Estados Unidos George Bush y Ronald Reagan, a las multinacionales, a los bancos y a los que se han enriquecido a costa de los demás. El documental es fiel al estilo de Moore, con una estructura narrativa casi inexistente y con golpes de efecto que cada vez se parecen más a los que preparan los programas de televisión de cámara oculta.

Voces que hacen decir cosas sin sentido a personajes como Bush o Reagan, imágenes infantiles que ridiculizan a estos ex presidentes de Estados Unidos o a responsables de multinacionales, todo parece valer para el realizador, que sigue sin profundizar en los debates que propone en sus documentales.

Moore se nutre de los testimonios de las personas que han caído en desgracia en su país para criticar el sistema capitalista, las que han perdido sus casas o que han visto cómo la muerte de sus seres queridos redundaba en beneficios para las empresas para las que trabajaban a través de pólizas de seguros irregulares.

Algo fácil de hacer en una situación como la actual y tras los escándalos financieros que han sacudido el mundo y que permite a Moore centrarse en bancos como Lehman Brothers o Citybank y empresas como General Motors, algunos de los nombres más unidos al desplome económico.

Todo ello con las tácticas habituales de sus documentales que dan lugar a situaciones bastante cómicas y un tanto repetitivas, cada vez que trata de entrar a un edificio o de entrevistarse con uno de los responsables bancarios o empresariales a los que critica. A pesar de todo, el documental es ágil y se deja ver con facilidad y contiene un buen puñado de verdades que parecen amenazar el tan manido "sueño americano".

Sin embargo, Moore señaló en la rueda de prensa que lo bueno del sueño americano es que los estadounidenses creen mucho en su país y tienen fe en la Justicia y en la Democracia.

"Aunque es difícil -reconoció- definir una democracia desde el momento en que es la economía la que guía la vida de los ciudadanos, que no pueden decidir cómo gestionar esa democracia". Por ello, alentó a todo el mundo a participar en la democracia, no solo en el momento de las elecciones porque "todo es posible". "Hace tres ó cuatro años si alguien hubiera dicho que un afroamericano iba a ser presidente de Estados Unidos no lo hubiera creído". Y el hecho de Barack Obama esté en el poder, demuestra "la capacidad de los americanos, pero también de la gente de todo el mundo" para lograr cambiar las cosas. Moore recordó la caída del muro de Berlín o la llegada al poder de Nelson Mandela en Sudáfrica como casos en los que la gente puede rebelarse de forma no violenta.

Pero, hizo hincapié en que "Obama no puede hacerlo todo solo. Debe ser la persona que la mayoría de los americanos han votado pero los ciudadanos también deben participar". Una participación que cada uno debe hacer desde su nivel. En su caso, desde el cine. Como fue el caso de su anterior trabajo, en el que ponía en tela de juicio el sistema sanitario estadounidense y que generó un debate del que se siente orgulloso. Moore aseguró no tener aspiraciones políticas y dijo que "la política es ser un ciudadano y estar implicado", por lo que aseguró que seguirá contribuyendo al proceso de cambio "de la mejor forma posible. Y lo único que sé hacer es escribir y hacer cine".

Elcomercio.com.pe

De ciudad



miércoles, 2 de septiembre de 2009

Kevin Warwick: ¡Quiero ser un ciborg!

Está tan fascinado por los robots que vaticina que a no mucho tardar todos llevaremos circuitos integrados en el cuerpo. Este profesor de cibernética ya se ha implantado varios dispositivos, ha conectado su sistema nervioso con el de su esposa y casi convence a la periodista Cristina Sáez.

A Kevin Warwick no le cabe la menor duda: en un futuro no muy lejano todos llevaremos microchips implantados en nuestro organismo. Con ellos podremos explicar sin palabras nuestros sentimientos, recuerdos o ideas. Seremos capaces de comunicarnos mejor con nuestra pareja; adiós a las broncas por malentendidos. También aprenderemos un nuevo idioma en cuestión de horas, aumentaremos hasta límites increíbles nuestra virtud para almacenar datos en la memoria y podremos enchufarnos directamente al ordenador para bajarnos la información que necesitemos o actualizar nuestro cerebro. Warwick es profesor de cibernética de la Universidad de Reading, en Inglaterra, y la mayor pasión de su vida son los robots. Lleva más de 15 años investigando cómo compensar nuestras limitaciones y potenciar nuestras habilidades mediante el implante de un entresijo de chips. Incluso se ha utilizado a sí mismo como conejillo de indias para convertirse en protagonista de algunos de los experimentos más revolucionarios en esta área de la ciencia. De hecho, hace 11 años se convirtió en el primer hombre-máquina.

–Quiero ser un ciborg. ¿Puedo?
–¡Claro! No sería la primera. Cada semana vienen a mi laboratorio entre 10 y 12 personas que desean entrar a formar parte de mi investigación. Me piden que les haga un implante, quieren experimentar.

–¿Y qué hay que hacer?
–No es sencillo. Hay muchas consideraciones éticas a tener en cuenta. De hecho, todas y cada una de las cosas que hacemos requie ren la aprobación de un comité ético. Algunas personas acuden a mí para que las ayude porque sufren una enfermedad y creen que un chip lo solucionará. A veces también nos visita gente con problemas mentales que cree que alguien le ha implantado un chip que la está volviendo loca y quiere que yo averigüe dónde está y quién ha sido. Una ilusión.

–En 1998 usted se convirtió en el primer ciborg de la historia.
–Sí, me implanté un chip en el antebrazo.

–¿Para qué servía?
–Para cosas muy sencillas, como identificaciones. Era un transmisor de radiofrecuencia con el que controlaba las puertas, las luces y la temperatura del pasillo y los despachos del departamento.

–No le veo demasiada utilidad.
–¡Pues la tiene! Por ejemplo, para personas discapacitadas o epilépticas. Los ciberimplantes pueden contener información sobre la medicación que necesitan estos últimos, de manera que, si sufren un ataque, el médico de urgencias podrá saber qué tratamiento seguir. En 2000 me implanté en la muñeca un artefacto bastante más complicado que el mencionado chip. Tenía más de un centenar de electrodos conectados a mis nervios, y con el podía controlar una mano robótica a distancia que reproducía mis movimientos. Hay muchas más aplicaciones; hace poco me implanté un electrodo que unía mi sistema nervioso a un ordenador.

–También logró convencer a su mujer para que se pusiera uno.
–El objetivo era enlazar nuestros sistemas nerviosos eléctricamente, y eso es lo que hicimos. ¡Nadie antes lo había conseguido! Fuimos capaces de llevar a cabo una forma muy básica de comunicación telegráfica, de un sistema nervioso a otro.

–¿Qué sentían?
–Cuando ella movía una mano, mi cerebro recibía un impulso eléctrico y reconocía que mi mujer me estaba enviando una señal. Nuestros cerebros se pueden adaptar, son aparatos sumamente inteligentes capaces de interpretar correctamente lo que pasa. Ella movía su mano y yo podía contar uno, dos o tres impulsos. De acuerdo, era una forma muy básica de comunicación, pero era directa, de cerebro a cerebro.

–¿A qué viene su empeño de convertirse en un ciborg?
–Quiero serlo por dos motivos. Por un lado, tengo un interés meramente científico. Quiero probar hasta dónde puede emplearse la tecnología para ayudar a las personas con discapacidades. Me gustaría que los que padecen parálisis parcial fueran capaces, por ejemplo, de conducir con el pensamiento. Por otro lado, y quizás sea esa la razón principal, se trata de darnos cuenta de lo pobres que somos los humanos mentalmente y de cómo podemos aprovechar la tecnología para mejorar nuestras habilidades cerebrales.

–¿Tan limitados somos?
–¡Muchísimo! Apenas percibimos un 5% de las señales que nos rodean. La vista es el mejor de nuestros sentidos e incluso así está muy limitada en el espectro de frecuencias. En cambio, utilizando la tecnología podemos ver luz infrarroja, ultravioleta, rayos X... Además, con ella somos capaces de recibir diferentes inputs sensoriales a la vez, de manera que conseguimos una comprensión mucho más compleja y completa del mundo en el que vivimos. Pensemos ahora en nuestra memoria, que es sumamente pobre en comparación con la de un ordenador, o en nuestro sistema de comunicación. ¡Nos debería dar vergüenza! Sin lugar a dudas, el de las máquinas es mucho mejor.

–¿Y si nuestros cerebros se colapsan con tanta información? Quizá no estén preparados para asimilar toda esa cantidad de datos extra.
–Nuestros cerebros son muy plásticos y se adaptan para asumir nuevas situaciones. Podemos exigirles más y desafiarles, incluso aunque seamos mayores. Vivimos en un mundo tecnológico en el que las máquinas se comunican de una forma mucho más rica, compleja y eficiente que nosotros; es lo que sucede con internet. Los humanos ya hemos entrado en contacto con esas potentes redes y nuestros cerebros ya han entendido –aunque de forma pasiva– las nuevas posibilidades de comunicación. Por eso, cuando les das la oportunidad de mejorar, se adaptan y aceptan el reto. ¿Cuánto pueden asumir? Esa es la gran pregunta. Quizás si los forzamos demasiado podemos dañarlos, aunque sólo hay una forma de averiguarlo.

–¿Cómo contribuirá la tecnología a mejorar nuestro sistema de comunicación?
–Pensemos en lo que contienen nuestros cerebros: ideas, recuerdos, colores, imágenes, sueños, etc. Después, reflexionemos sobre cómo comunicamos todo eso a las demás personas. Lo cierto es que no podemos verbalizar todas las señales complejas que hay en nuestra mente. ¡No somos capaces de transmitir todos esos datos a través del discurso! El lenguaje lanza mensajes codificados que guardan una información parecida a nuestros pensamientos originales. En cambio, la posibilidad de conectar directamente nuestro cerebro con el de otra persona y enviarle señales, o mandarlas a un ordenador, abre muchas nuevas posibilidades de comunicación. Y no sólo en términos de lenguaje, sino también de colores, imágenes, conceptos, pensamientos abstractos, sentimientos, emociones... Seremos capaces de comunicarnos en un sentido mucho más amplio y rico del que conocemos ahora.

–¿Nos resultará más fácil entendernos? ¿Evitaremos más de una discusión por malos entendidos?
–Se producen muchos desencuentros incluso en parejas que llevan unidas muchos años y que se conocen muy bien. Aún tienen problemas de entendimiento. Uno dice una cosa, el otro la interpreta al revés y se enfadan. Pero si emites un mensaje simple y lo pones en su contexto, con sus sentimientos y sus diferentes atributos asociados, entonces todo queda mucho más claro. La otra persona lo entiende y te contesta, tú respondes, y así sucesivamente. La riqueza del intercambio de ideas podría dar un verdadero paso de gigante.

–Construiremos una red de cerebros.
–¡Claro! La gran pregunta es hasta qué punto podremos entender las señales sobre los sentimientos y las emociones de otra persona. ¿Lo aprenderemos de forma automática o será necesario un proceso de adaptación? ¡Resulta excitante! Tenemos ante nosotros la oportunidad de unir nuestras formas de pensar.

–¿Y ahora lleva usted algún implante?
–No, tengo que decir que actualmente soy una persona completamente normal. Estoy trabajando en el desarrollo de un implante computerizado cerebral. Intentamos desarrollar un cerebro.

–¿Cómo?
–Extraemos neuronas de embriones de ratas, las cultivamos, las hacemos crecer y las introducimos en un cuerpo de robot. Nuestra investigación trata de crear cerebros biológicos para máquinas. También estamos intentando hacer lo mismo con células nerviosas obtenidas de embriones humanos, de manera que en un futuro podamos tener robots con apariencia y neuronas humanas. El objetivo es investigar enfermedades como el Parkinson o estudiar las partes del cerebro que dejan de funcionar después de un infarto cerebral. También queremos averiguar si podemos ampliar o potenciar nuestra memoria y, además, añadir neuronas nuevas que mejoren nuestras capacidades mentales, lo que supondría un gran avance para combatir enfermedades.

–¿Existe alguna otra aplicación fuera del ámbito de la salud?
–Por supuesto. Los robots podrían estar por toda la casa. Y en lugar de ser meras piezas de tecnología, se convertirán en verdaderos cerebros biológicos a los que podremos tratar como amigos. En el ámbito militar hay aplicaciones inmediatas. Seguramente, en los próximos 15 años los soldados ya no irán a la guerra a perder su vida. Se reemplazarán por robots.

–¿Como en Terminator?
–Probablemente. De hecho, puede que sucedan muchas de las cosas que aparecen en el cine. En este film de ciencia ficción, las máquinas inteligentes deciden que no les gusta lo que hacen los humanos y toman el control de la situación. Y creo, sinceramente, que deberíamos considerar esa posibilidad.

–¡Glups!
–Sí, es cierto. Las películas como Terminator vaticinan un futuro de terror para las personas bajo la tiranía de las máquinas. Pero aún estamos a tiempo de redibujar ese futuro y evitarlo. ¿Cómo? Actualizando nuestras capacidades, ¡convirtiéndonos en ciborgs! No tenemos que dar la oportunidad a las máquinas de que nos traten como quizás les gustaría.

–O sea, que los replicantes de Blade Runner son más que posibles.
–Muchos de los escenarios surgidos de la ciencia ficción son peligrosos y factibles. Por tanto, es lógico que la gente tenga miedo porque desconoce qué va a pasar. Creo que tenemos que preocuparnos en su justa medida. No podemos decir: “Bah, es sólo una película”. Aunque estamos en nuestro derecho de asustarnos, tenemos que enfrentarnos a ese futuro potencial. Aún así, para mí resulta superexcitante, porque también podemos valorar las muchas posibilidades beneficiosas de los ciborgs: ayudar a la gente con discapacidades, permitirles llevar una vida normal y mejorar nuestra comunicación.

–Hace un par de años, cuando desapareció la pequeña Madeleine McCann de un hotel del Algarve portugués, usted propuso implantar un chip a los niños. Una idea que fue muy polémica.
–Cierto, a las asociaciones de derechos de la infancia no les hizo demasiada gracia. Aunque creo, sinceramente, que hay un montón de padres a los que les gustaría tener esa opción. Se podría colocar un chip en el niño que proporcionara una cobertura razonable e indicara a los padres dónde está. Puede resultar muy útil en el caso de que el crío se pierda o lo secuestren, aunque también comporta muchas cuestiones éticas. ¿Es lícito que los padres sepan dónde está su hijo todo el tiempo?

–En una discoteca de Barcelona, los clientes se pueden poner un chip que funciona como una especie de tarjeta de crédito que va acumulando el importe de las bebidas que ingieren sus portadores.
–¡Sí, lo he oído! ¡Es fantástico! Espero que me hagan miembro de honor gratis. Me encantaría que me enviaran una invitación especial por ser un ciborg. La idea me parece muy interesante. Nunca antes pensé que los implantes pudieran servir para propósitos sociales, y menos para salir de marcha a un club nocturno.

De Muyinteresante.es

martes, 1 de septiembre de 2009

Cada segundo es vida



Cada cosa que sucede, es parte del estar vivo. Todo es hermoso... y el punto no es ser pesimista, sino que fluir en cada segundo de vida. No hemos tenido la elección de querer vivir o no, nos ha tocado nacer y no nos queda otra que poner en funcionamiento el corazón, mente y alma espiritual, liberándonos del sufrimiento, de la ilusión y de la confusión.
Vivimos como si el mundo se acabara mañana, o como si nunca se acabase la vida propia de uno, pero lo más importante es ese momento que no se le da tanta atención, por ser cosa/situación que sucede muy comunmente.
Al tesoro que buscamos, lo tenemos ahí al frente, eso que podemos percibir por medio de los sentidos de la vista, del tacto, etc. Pues, eso es, esto de ahora, este instante ¿y lo que harás despues? cuando llegue ese instante se verá, o quizá no sea vea por haber sido ciego y cerrado.
Nosotros, los seres humanos, somos ciegos, pero cuando nos abrimos podemos llegar a ver un mundo interior/exterior distinto.

Paz y amor.