miércoles, 22 de abril de 2009

El cerebro y el sonido.

¿Es la realidad audible tal cual es? o ¿Es la realidad audible como el cerebro la hace? Las famosas ilusiones, ilusiones musicales.

Como lo indica el término, las ilusiones auditivas crean una sensación engañosa a través de nuestros oídos. Pero la experiencia involucra también al cerebro, que decodifica el sonido de manera tal que nos permite, por ejemplo, situarnos imaginariamente en algún lugar o percibir algo que no es lo que parece.

Varias de las ilusiones auditivas más célebres fueron creadas muchísimos años atrás por compositores clásicos, rescatadas de generación en generación y hoy disponibles gracias a la Web. Otras, en cambio, han sido logradas a raíz de los avances tecnológicos de los estudios de grabación.

Un ejemplo de la primera clase consiste en interpretar determinados arpegios (notas sucesivas de un acorde) a una velocidad tal que nos parece oír una melodía por detrás, melodía que desaparece si ese mismo arpegio se interpreta de forma más lenta.

Proponemos un repaso de algunas de las mejores ilusiones auditivas que pueden encontrarse por Internet.

Escala creciente. Para notar el truco, hay que escuchar el audio varias veces y de forma continuada. ¿Suena diferente? En rigor es la misma escala, sólo que parece ascender infinitamente.



Palabras más o menos. Este es un curioso ejemplo de cómo el cerebro "escucha" lo que quiere oír. La voz repite la misma secuencia de frases, pero supuestamente el oyente lo interpreta con algo relacionado a su pensamiento del momento.



Fuego. Grabado con el uso de diferentes canales y paneos, crea la sensación de que alguien cerca nuestro prende un fósforo o hace sonar la pequeña caja que los contiene. El efecto es mucho más real con auriculares.



Más bajo. Similar a la escala creciente, sólo que en sentido contrario: un sonido que desciende, incluso cuando se escucha el audio por segunda vez.



Peluquería virtual. Una de las ilusiones auditivas más populares que rondan por la Web y sin dudas una de las mejores. En este caso es imprescindible usar auriculares y cerrar los ojos. Aunque está en inglés, se disfruta de igual manera si no se conoce el idioma. El ruido de las tijeras es universal.



Diez efectos en uno. Este último video recopila una decena de ilusiones (incluidas varias de las citadas anteriormente) junto con otras igualmente curiosas. Por ejemplo, un ritmo percusivo constante pero que crea la sensación de ir aumentando, un sampler de unas campanas que parece que van cayendo, notas graves y agudas que indican tener una falsa conexión entre sí y otras más. A escuchar.

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